Parálisis de vértice respuesta
juega razón, manantial sospecha
imaginando latir, árida resolana
ante el umbrío suburbio del alma
succionando la mutilada espera.
Un vulvar espasmo acrecienta
llagas del devenir cerneado
donde culmina saber y deshecho
que dialoga en sinfín discorde
enquistado al eborario espejo.
Toda luz discurre remansos
atenazando agnición y apología,
mantos en piedad, acallamiento,
infinibles albergues y porfía
con oculto manto inmarcesible.
Tus oídos fraguando silencio,
espirales de etérea ausencia
cuando el génesis abisma
cada palabra suspensa
en doncellez de nidales.