“Domremy contempló el tránsito de sus pasos de niña, jugueteando en el verdor de la campiña, exuberante manantial de sueños celestiales. La obsesión del pecado incomprendido la llevó, a sus apenas trece años, a arremolinar...”
72813 veces leido | publicado el 30 de Mayo de 2005 | leer completo