“Cien puertas sagradas y ningún adiós. Ni Homero renació la condena del silencio El simún arrastra en el valle de Tebas sus cadenas, mientras, un rostro de mujer pone garra a su vigilia de monolítica estirpe...”47793 veces leido | publicado el 18 de Septiembre de 2004 | leer completo