El tempo adagio es más lento que el andante (72 negras por minuto) y más rápido que el largo (40 negras por minuto), el grave y el larghetto. Por extensión, un adagio es una pieza musical cuyo tempo es lento. Generalmente se llama así al segundo o tercer movimiento de una sinfonía o un concierto.
En mi concepto emocional referido a la mujer, significa el sendero del adiós. Esas espaldas que sumergen el atemporal manifiesto de lágrimas en nuestras miradas, sin la capacidad de que puedan desprenderse libremente. Es el compendio de lo que no alcanzamos a comprender, muriendo en las renuentes palabras del silencio. Un argumento de maletas sin destino cierto, precursoras de esperanzas inconclusas.
He vivido el Adagio más lastimoso de mi existencia. Y, la púa de mi corazón recorre los surcos de esa trama que fenece en el renacimiento de un recuerdo sin sentido y para siempre.