Aburando amor sobre cerrojo
dilata en espacio la partida
y soy Delos que en Brizno
se adormece
renacido por tules ya silentes
donde augura la dicha
su inclemente
dimanar visión de otra agonía.
Eborario bisturí, pubis en cierne
que atraviesa pasiones perimidas
entre dintel cóncavo e infando
se suscita
y el petroso neuronal olvido
ha convidado en ágrafo
destierro
la verdad negando su capricho.
La presunción aviene soledades
jineteando dioramas angustiosas
siendo altar la noche por mañana
que ruega
su ración venturosa de un dilema
por ese adiós presagiado
de retratos
en temperie de sueños diluviados.